1. No debemos exaltarnos. La altura que pensábamos que estábamos desaparecerá como la hierba. Solo la palabra de Dios permanecerá para siempre. (Santiago 1: 9-11)
    Santiago 1:11, Isa 40: 8, Lc 14: 8-9, Mt 23:10

No debemos exaltarnos a nosotros mismos. La altura que pensábamos que estábamos desaparecerá como la hierba. Solo la palabra de Dios permanecerá para siempre. (Santiago 1: 9-11, Isa 40: 8)

Santiago 1: 9 El hermano que es de baja suerte, gloríese en su alteza: 10 Mas el que es rico, en su bajeza; porque él se pasará como la flor de la hierba. 11 Porque salido el sol con ardor, la hierba se secó, y su flor se cayó, y pereció su hermosa apariencia: así también se marchitará el rico en todos sus caminos.

Isa 40: 8 Sécase la hierba, cáese la flor: mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre.

El único alto es Cristo. (Lc 14: 8-9, Mt 23:10)

Lucas 14: 8 Cuando fueres convidado de alguno á bodas, no te sientes en el primer lugar, no sea que otro más honrado que tú esté por él convidado, 9 Y viniendo el que te llamó á ti y á él, te diga: Da lugar á éste: y entonces comiences con vergüenza á tener el lugar último.

Mt 23:10 Ni seáis llamados maestros; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo.